Frank Borman, astronauta del Apolo 8, murió a los 95 años

A bordo del Apolo 8, el astronauta dirigió, para la Nasa, la primera misión en orbiar la Luna.

El astronauta Frank Borman, otrora comandante del Apolo 8, misión de la NASA que logró, por primera ocasión, orbitar la Tierra, falleció el pasado 7 de noviembre de 2023, a los 95 años, en Billings, Montana. Así lo dio a conocer la Agencia Espacial norteamericana a través de un comunicado.

«Este día recordamos a uno de los mejores [astronautas] de la NASA. Frank Borman fue un verdadero héroe estadounidense. Entre sus muchos logros, se desempeñó como comandante de la misión Apolo 8, la primera misión de la humanidad alrededor de la Luna en 1968». Informó la NASA.

Asimismo, destacaron que Borman siempre tuvo un aprecio especial por la aviación y la exploración. Él inició su carrera siendo un oficial de la Fuerza Aérea de Estados Unidos de Norteamérica. «Su amor por volar resultó esencial a través de sus puestos como piloto de combate, piloto operativo, piloto de pruebas y profesor asistente. Su excepcional experiencia y conocimientos le llevaron a ser elegido por la NASA para unirse al segundo grupo de astronautas», agregaron.

Además, fue un veterano de Gemini 7. Pasó 14 días en órbita terrestre baja y realizó el primer encuentro en el espacio, acercándose a unos pocos pies de la nave espacial Gemini 6. Tras su paso por la Agencia Espacial, Borman no abandonó su pasión por la aviación, llevándolo a convertirse en el director ejecutivo de Eastern Airlines.

«Frank sabía que la exploración tenía el poder para unir a la humanidad cuando comentó: ‘La exploración es realmente la esencia del espíritu humano’. Su servicio a la NASA y a nuestra nación sin duda impulsará a la Generación Artemisa a alcanzar nuevas costas cósmicas». Expresaron.

Frank Borman: El pionero espacial que comandó la misión del Apolo 8

En la historia de la exploración espacial, el nombre de Frank Borman es uno de los más destacados. Su papel resultó crucial al comandar la misión del Apolo 8 en diciembre de 1968. Se trató de la primera misión tripulada en orbitar la Luna y retornar a la Tierra a salvo.

Borman nació el 14 de marzo de 1928, en Gary, Indiana. Previo a su llegada a la NASA, poseía una destacada carrera militar en la Fuerza Aérea de Estados Unidos. Y, a lo largo de su trayectoria en la Agencia Espacial, logró convertirse en una pieza clave para la conquista del espacio, fijando su nombre en la historia aeroespacial, principalmente, en la exploración lunar durante la década de los años 60 tras asumir el encargo de. comandar la misión Apolo 8, un hito que cambiaría, para siempre, la forma en que la humanidad contempla la Luna.

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La misión Apolo 8, se lanzó el 21 de diciembre de 1968 y se convirtió en la primera en llevar tripulación humana para orbitar la luna. Junto con Borman, viajaron sus compañeros de tripulación, James Lovell y William Anders. La expedición dio la vuelta a nuestro satélite natural, consiguiendo imágenes nunca antes vistas de la Tierra y la Luna. La famosa fotografía «Earthrise}, tomada por Anders, se volvió un ícono de la fragilidad y la belleza de nuestro planeta.

Los retos de Frank Borman a bordo del Apolo 8

La valentía y la tenacidad de Borman resultaron evidentes cuando la tripulación de Apolo 8 se encontró con desafíos inesperados, como la pérdida temporal de comunicación con la Tierra. No obstante, con calma y determinación, Borman lideró a su equipo a través de estos momentos críticos, mostrando una habilidad excepcional para la toma de decisiones bajo presión.

Frank Borman no solo llevó a cabo una misión pionera en la exploración espacial. También allanó el camino para futuras hazañas. Su liderazgo en Apolo 8 estableció las bases para las misiones lunares posteriores, creando el camino para el histórico aterrizaje del Apolo 11 en 1969.

Después de su carrera en la NASA, Borman se mantuvo como una figura influyente en la aviación y la empresa privada. Su legado permanece inextricablemente vinculado a la valentía y visión que demostró durante la misión Apolo 8. Frank Borman, el comandante que llevó a la humanidad a mirar la Luna con nuevos ojos, seguirá siendo un faro de inspiración para generaciones futuras de exploradores espaciales.